But I also came to the conclusion that chess brilliance has nothing to do with high intelligence in other areas, but tends to give top players a false idea of their own high intelligence. They equate their FIDE rating with their IQ. In fact they have devoted so much time to chess that they may not be so brilliant at other things.
— Sarah Hurst: 20 Questions (KingPin chess)
Traducido libremente: el talento para el ajedrez no guarda relación con la inteligencia en otras áreas de conocimiento, pero afecta a la percepción que de su propia inteligencia tienen los jugadores de élite que ven equivalente su Elo y su cociente intelectual. Añade que, realmente, han dedicado tanto tiempo al ajedrez que, precisamente por ello, no pueden ser brillantes en otras áreas.
La entrevista a la periodista Sarah Hurst merece la pensa ser leída en su integridad, a pesar de que quizá en sus valoraciones contenga un serio sesgo político sobre la situación actual en Rusia.