A estas alturas seguro que conocéis perfectamente mi opinión sobre todas las bondades milagrosas atribuidas al ajedrez que deben sin duda convertirlo en asignatura obligatoria 😛 Pero a todo hay quién nos gane, y cuando hay dinero de por medio (industria del videojuego) la cosa mejora: Canarias se plantea crear una liga de eSports entre 20 colegios como actividad extraescolar.
Habrá quién piense que poco se diferencia del ajedrez, es más, sus críticos lo tachan de ocio sedentario, que va en contra de las recomendaciones oficiales para la prevención del sobrepeso y la obesidad (mira, como el ajedrez). Claro, que, a diferencia del ajedrez (y ahora doy voz a los detractores) los eSports no han sido creados con intención didáctica y no se ha demostrado su efectividad ni su impacto positivo en la salud o la educación. Y además, por seguir con los detractores, el proyecto es impresentable desde el punto de vista didáctico y pedagógico, hecho por la vía rápida, y parece que quieren crear una necesidad de consumo; están haciendo adictos masivos.
Y aquí sí que el ajedrez gana: favorece la capacidad de concentración y de toma de decisiones, pero sin ser una actividad consumista y (casi casi) sin generar excesivas adicciones. Lástima que nos falten una industria y unos medios de comunicación detrás. Sin duda, en mi lista de cosas a hacer en un colegio el ajedrez siempre irá antes que los eSports.
Tableros, libros en papel así como electrónicos, módulos computarizados, bases de datos, servidores en línea…. Ciertamente descentralizada a diferencia de los juegos de video, pero alguien podría considerar todo esto una «industria del ajedrez» (sobre todo los anarquistas y conspiracionistas). Gracias a Dios que los conservadores no gobiernan el ajedrez, pues con su falta de visión el juego/deporte ciencia estaría muerto.